Triduo Peregrino en honor a San Cayetano
San Cayetano, con esperanza viva te pedimos paz, salud y trabajo
Oración inicial
San Cayetano:
Santo de la solidaridad y la confianza en la Divina Providencia.
Con esperanza viva nos acercamos a vos, reconociendo que siempre brindas tu mano compasiva a los que necesitan de paz, pan, salud y trabajo. Hoy debido a la Pandemia se cierran fuentes de trabajo y muchos no pueden ganar el pan para la mesa de sus familias. Hay tristeza y desolación.
Intercede ante la Divina providencia para que esta enfermedad del Covid 19 se aparte de nosotros y de toda la humanidad. Que se abran fuentes de trabajo y muchos puedan acceder a el. Que los gobernantes miren la realidad de los que menos recursos tienen y velen por sus necesidades con entrega y lucidez.
Que Como Iglesia siempre caminemos junto a los pobres y marginados, a los estudiantes y trabajadores y siguiendo tu ejemplo seamos los primeros hermanos solidarios con los que hoy nos muestran el rostro concreto y sufriente de nuestro Señor y salvador Jesús, aquel que en tu imagen bendita acurrucas como niño. Amen
Con esperanza viva, San Cayetano escucho la voz de Cristo para servirlo en los pobres y sufrientes.
Del Santo Evangelio según San Mateo 10:
17 Cuando Jesús salía para irse, vino un hombre corriendo, y arrodillándose delante de Él, le preguntó[a]: «Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?». 18 Jesús le respondió: «¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino solo uno, Dios. 19 Tú sabes los mandamientos: “No mates, no cometas adulterio, no hurtes, no des falso testimonio, no defraudes, honra a tu padre y a tu madre”».
20 «Maestro, todo esto lo he guardado desde mi juventud», dijo el hombre. 21 Jesús, mirándolo, lo amó y le dijo: «Una cosa te falta: ve y vende cuanto tienes y da a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; entonces vienes y me sigues». 22 Pero él, afligido por estas palabras, se fue triste, porque era dueño de muchos bienes.
¡Palabra del Señor!
San Cayetano fue un hombre del renacimiento, quedo huérfano de Padre muy niño (Quizás ahí comprendió la necesidad de la figura de un Padre que este presente ante el desamparo del prójimo). Con la ayuda de su mama, estudio y tubo dos doctorados en la universidad de Padua. Por designios de la Providencia llego a ser secretario privado del Papa Julio II y notario de la Santa Sede. (Aquí en el corazón de la Iglesia descubrió que este debía latir en amor de Cristo, y con amabilidad y espíritu amistoso se entrego para que Cristo lata a través de el). A los 33 años se ordeno sacerdote (Llego a tener un profundo amor a la Misa) y procuro enseguida estar al servicio y ayuda de los mas pobres (-¿No es este el rostro de un Cristo samaritano que el mundo necesita?)
Este era un Joven rico como el que se encontró con Cristo, pero el no apago su sed de vivir a pleno el seguimiento de sus huellas, al contrario con la ayuda del Espíritu, encarno creativamente su Evangelio de desprendimiento y consagración.
La Iglesia «tiene un papel público que no se agota en sus actividades de asistencia y educación» sino que procura «la promoción del hombre y la fraternidad universal». No pretende disputar poderes terrenos, sino ofrecerse como «un hogar entre los hogares —esto es la Iglesia—, abierto […] para testimoniar al mundo actual la fe, la esperanza y el amor al Señor y a aquellos que Él ama con predilección. Una casa de puertas abiertas. La Iglesia es una casa con las puertas abiertas, porque es madre». Y como María, la Madre de Jesús, «queremos ser una Iglesia que sirve, que sale de casa, que sale de sus templos, que sale de sus sacristías, para acompañar la vida, sostener la esperanza, ser signo de unidad para tender puentes, romper muros, sembrar reconciliación»
FRATELLI TUTTI DEL SANTO PADRE FRANCISCO SOBRE LA FRATERNIDADY LA AMISTAD SOCIAL. N. 276
En el altar de nuestro hogar, junto a la imagen o estampa de San Cayetano prendemos una vela y escribimos la frase de nuestra intención general en este Triduo peregrino: San Cayetano, con esperanza viva te pedimos paz, pan, salud y trabajo.
Pedimos (Además de otras intenciones) a la Divina providencia por intercesión de San Cayetano: Por una sociedad en donde se cultive los valores de la igualdad, la solidaridad y la fraternidad, y que a imitación de nuestro santo estemos dispuestos al servicio y ayuda de los mas vulnerables que están sufriendo tremendamente en esta pandemia.
Rezamos un Padre nuestro, tres Ave María y un Gloria.
Con esperanza viva, San Cayetano, se santifico como miembro de la Iglesia. Disponible, servicial y fraterno.
Lectura de la carta de San Pablo a los Romanos 12:
12.Alégrense en la esperanza, sean pacientes en la tribulación y perseverantes en la oración. 13.Consideren como propias las necesidades de los santos y practiquen generosamente la hospitalidad. 14.Bendigan a los que los persiguen, bendigan y no maldigan nunca. 15.Alégrense con los que están alegres, y lloren con los que lloran. 16.Vivan en armonía unos con otros, no quieran sobresalir, pónganse a la altura de los más humildes. No presuman de sabios.
San Cayetano como sacerdote vio la necesidad de que la Iglesia vuelva a la fuente del Santo Evangelio pero no se lo reclamo a nadie, el empezó por vivir la llamada y el camino de la conversión. Vio que los pobres necesitaban de la Iglesia, pero el con el mismo espíritu, no se lo reclamo a nadie. El empezó con el gesto de vender todos sus vienes y repartiéndolos con ellos y no solo esto, quiso imitar al Redentor caminado junto con ellos y sirviéndolos. El se puso a la altura de los humildes y se hizo instrumento de la Divina providencia. San Cayetano, se santifico como miembro de la Iglesia. No criticó, ni compitió… hizo su parte en la extensión y crecimiento del Reino de Cristo que es comunión y fraternidad.
Desde nuestra experiencia de fe y desde la sabiduría que ha ido amasándose a lo largo de los siglos, aprendiendo también de nuestras muchas debilidades y caídas, los creyentes de las distintas religiones sabemos que hacer presente a Dios es un bien para nuestras sociedades. Buscar a Dios con corazón sincero, siempre que no lo empañemos con nuestros intereses ideológicos o instrumentales, nos ayuda a reconocernos compañeros de camino, verdaderamente hermanos.
FRATELLI TUTTI DEL SANTO PADRE FRANCISCO SOBRE LA FRATERNIDADY LA AMISTAD SOCIAL. N. 274
En el altar de nuestro hogar, junto a la imagen o estampa de San Cayetano prendemos una vela y escribimos en una hoja, dos palabras, actitudes cristianas que vivió San Cayetano: DISPONIBILIDAD Y SERVICIO.
Pedimos (Además de otras intenciones) a la Divina providencia por intercesión de San Cayetano: Para que respondamos cada día a la llamada de la conversión al amor y misericordia del Señor y que desde nuestro estado de vida, clérigos, consagrados, laicos…, hagamos nuestra parte en la extensión del Reino de Cristo que es comunión y fraternidad.
Rezamos un Padre nuestro, tres Ave María y un Gloria.
Con esperanza viva, San Cayetano se hizo hombre de concordia, buscador de una sociedad en paz, sin violencia, una sociedad que brinde oportunidades a todos, sin marginar ni oprimir.
Del Santo Evangelio según San Marcos 9:
35 Entonces Jesús se sentó, llamó a los doce y les dijo:
—Si alguno quiere ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos. 36 Luego tomó a un niño y lo puso en medio de ellos. Abrazándolo, les dijo: 37 —El que recibe en mi nombre a uno de estos niños me recibe a mí; y el que me recibe a mí no me recibe a mí, sino al que me envió.
¡Palabra del Señor!
San Cayetano fundÓ con otros sacerdotes una sociedad de vida apostólica, Teatinos… que poniendo su confianza en la Divina providencia, se dieron de si por entero en la pastoral (Cosa que no se veía en general en los sacerdotes de su tiempo) catequizando y promoviendo obras de solidaridad y promoción humana. Además fundo hasta un banco con la particularidad de dar prestamos por poco interés a familias mas pobres, impidiendo que recurran a bancos usureros.
(San Cayetano abrazó en los mas vulnerables al Niño Jesús).
…Hay dos tipos de personas: las que se hacen cargo del dolor y las que pasan de largo; las que se inclinan reconociendo al caído y las que distraen su mirada y aceleran el paso. En efecto, nuestras múltiples máscaras, nuestras etiquetas y nuestros disfraces se caen: es la hora de la verdad. ¿Nos inclinaremos para tocar y curar las heridas de los otros? ¿Nos inclinaremos para cargarnos al hombro unos a otros? Este es el desafío presente, al que no hemos de tenerle miedo. En los momentos de crisis la opción se vuelve acuciante: podríamos decir que, en este momento, todo el que no es salteador o todo el que no pasa de largo, o bien está herido o está poniendo sobre sus hombros a algún herido.
FRATELLI TUTTI DEL SANTO PADRE FRANCISCO SOBRE LA FRATERNIDADY LA AMISTAD SOCIAL. N. 70
En el altar de nuestro hogar, junto a la imagen o estampa de San Cayetano prendemos una vela y escribimos en una hoja, “Niño Jesús yo quiero abrazarte como San Cayetano en los hermanos…” y terminamos la frase con personas (O grupos) que necesitan de ayuda y que yo me quiero disponer a ayudarlos. Pedimos (Además de otras intenciones) a la Divina providencia por intercesión de San Cayetano, para que nunca pasemos de largo frente a realidades o personas que se presentan con grandes necesidades, sino que como muchos hombres y mujeres de buena voluntad, seamos creadores de una cultura del encuentro, sanando las heridas de la indiferencia y promoviendo la amistad social.
Rezamos un Padre nuestro, tres Ave María y un Gloria.